Viajar y conocer nuevo lugares es una experiencia única. Mientras más nos relacionemos con el lugar de destino mucho mejor. Sin embargo, muchas veces el participar de la gastronomía del lugar de visita o participar en ciertas actividades puede traernos ciertos problemas comunes entre los viajeros. Uno de estos problemas es el malestar del viajero. Sin saber cómo evitarlo usted puede pasar unos días fuera de sus vacaciones. A continuación explicaremos las principales dudas respecto al malestar del viajero.

La malestar del viajero y sus síntomas

Es una enfermedad causada por un agente infeccioso como el Escherichia coli, el vibro cólera, la salmonella, el virus de la hepatitis A, etc. Usted puede adquirirla en destinos de alto riesgo (por lo usual en ciertos países de África, Asia, Centroamérica y Sudamérica). La forma de contagio se produce por la ingesta de agua o alimentos contaminados. En realidad se debe a una falta de higiene ya sea en la manipulación de los alimentos como en el lavado de los utensilios a usar.

Se presenta por lo usual en unos días después de producirse el contagio. Se caracteriza por la presencia de diarrea, varias veces al día. También lo acompañar dolores de cabeza, cansancio, vómitos, náuseas, dolor abdominal y retortijones.

Cómo evitarlo

Al igual que en su país de origen usted debe tomar medidas de higiene básicas y tener cuidado con los alimentos que consuma.

  • En el caso de las bebidas tome de preferencia las que hayan sido envasadas industrialmente o incluso aquellas que usted mismo haya abierto. Evite usar hielo en las bebidas cuando no hay garantías del agua empleada. Si bebe leche en un campo, asegúrese de hervirla.
  • Tenga cuidado de ingerir alimentos frescos sin un lavado seguro.
  • Evite comer carnes, pescado o mariscos que estén a medio cocer.
  • Si va a comer alimentos de un vendedor ambulante o buffet de un restaurante, compruebe que estos no estén en contactos con alimentos crudos de lo contrario se podrían contaminar directamente. Evite comer alimentos que contenga huevo crudo, como mayonesas o cremas.
  • En general es mejor consumir productos envasados en lugar de aquellos que se venden a granel (como helados, jugos, etc.).
  • No se bañe en ríos o lagos que no se tenga plena seguridad de su calidad higiénica.

Qué hacer si tiene el malestar del viajero

Cuando se presentan los síntomas, lo más importante es evitar la deshidratación. Asegúrese de  beber abundante líquido y mejor si incluye sales de rehidratación oral. El desorden provocado por el malestar del viajero, por lo usual, se resuelve sin ningún tratamiento en unos tres o cuatro días. Pero lo más recomendable y prudente por hacer es recurrir a un centro de salud de preferencia uno afiliado a su plan de seguro de viajes.

Las ganas y el entusiasmo que tenemos al visitar un destino nuevo deben ser acompañadas de un cierto cuidado sobre todo cuando se trata de los alimentos y bebidas que ingerimos. Y recuerde siempre que prevenir es mejor que curar.